-¡Mierda Joana! No podes estar acá.- Exclamo.
Joana maulló y siguió ronroneandole en las piernas.
-Como quieras.- Dijo.
Saco la bufanda y fue hasta la puerta, se fijo en los mensajes del teléfono, y volvió hasta donde estaba su libreta, no sin darse un buen golpe en la rodilla con la mesa. Dio un gritito que lo hizo sentir algo avergonzado y se fue de su departamento en Concordia.
Fue hasta un banco, se sentó, miro el reloj de la calle y espero media hora.
Eran 7:42 cuando se levanto del banco y volvió a su departamento, agarro su libreta y volvió a anotar en ella. Al terminar fue a ver en el único cajón sano que quedaba de su biblioteca.
-Genial.- Dijo.
Cerro el cajón y decidió que era buen momento para dormir un rato.
5:10 de la tarde despertó, se salteo esta vez la comida y vio que Joana lo miraba, parecía mas grande y su pelo de un color gris parecía negro. Como si de una bestia se tratara. << Tonterías tuyas Juan, ja>> pensó y siguió durmiendo. Eran las 9:04 de la noche, seguía sin tener hambre así que volvió a saltearse la comida, <<¿por que no? tengo el resto del día para comer>> pensó.
Se sentó en el sillón, para ver un poco de televisión, busco el control, y la prendió. 10:25 dejo de ver el televisor y fue a buscar a Joana, era momento de que ella coma. Fue al baño, por lo general le gustaba esconderse atrás de el lavamanos.
-Joana, Joana- Susurraba.
Vio su sombra, era mas grande que la de la bestia que creyó ver, salio del baño rápido, asustado, pensando en que era solo el sueño <
Se encerró en su cuarto como si fuera un chico de 6 años pensando que esconderse bajo las sabanas lo protegería.
A las 11:47 salio convencido de que deliraba, fue a la cocina, estaba muerto de hambre, agarro lo primero que vio y después de comer anoto en su libreta.
Escucho gruñidos, y la vio, a la bestia que estaba dentro de Joana, su cuerpo parecía flotar en ese momento tan importante, estaba mareado y como pudo se metió en su cuarto.
Dio un grito mientras cerraba la puerta, y fue a su cajón y saco su arma <<"de bolsillo">> pensó como si se tratara de un libro y rió de forma nerviosa. Eran 11:56 y la bestia destruyo la puerta, Juan vio en sus ojos a la mascota que una vez fue Joana y empezó a llorar, mientras disparaba a su cara.
Se escucho un estruendo y un final seco, nada. Seguía viva. Trato de alejarse lo mas que pudo, pero Joana lo agarro del pie y casi se lo arranca, tuvo tiempo de agarrar su libreta, y agregar, de forma ilegible, lo mismo que escribía siempre en esa libreta << Odio haberte matado N...>> Joana le arranco la pierna y la libreta termino al costado de la puerta por la reacción, Dio un grito corto y se desmayo. Era ya la media noche, Joana tomaba leche de su pote. Y Juan no despertó.
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